Tres, dos, uno... y ¡comienza!

Tiempo atrás, muuuchos años atrás; mi maestra de matemáticas de la secundaria (les dije que mucho tiempo atrás ¡eh!) nos comentaba que el ser humano para dejar legado de su existencia en este mundo, requería hacer tres cosas claves:

- Plantar un árbol
- Tener un hijo
- Escribir un libro

Bien, siguiendo esa línea para dejar mi huella en este planeta… uno de los dos árboles que están enfrente de mi casa fue plantado por mí, ya tiene 9 años y ha llevado una vida próspera con ciclos óptimos (primer paso cumplido).

Tener un hijo, ¡lo dudo!, ¡ni pensarlo!, no tengo el don, ni la disciplina, ni el deseo, ni los planes, ni paciencia… bueno, bueno… no es buena idea concebir. Y escribir un libro ¡mucho menos!, mi léxico es limitado, mi gramática precaria y mi ortografía básica...

Luego descubrí que la gran psicología de la humanidad inventó para no caer en depresión, las famosas “metas sustitutas” (de las cuales soy fan). Es por eso que en vez de hijos disfrutaré a mis sobrinos, la primera es bien chicles y está hermosa, el o la que esta por venir ya lo espero con ansias... segundo punto cumplido con la meta sustituta.

Y para escribir mi “libro” ya tengo una solución; aprovecharé la tecnología y el espacio que siempre tiene para quien quiera hacer uso de él, aprovecharé la red de redes como hospedaje de las letras que pueda conjugar y crear artículos con o sin sentido según se vea… estuve pensado por un rato, ¿qué tópico sería bueno utilizar para crear una bitácora?, mis primeras opciones fueron hablar sobre los libros que leo, la música que escucho, las películas que veo o críticas a la sociedad…. mmm pero hay tanta gente experta en esos campos invadiendo la red que me vería un tanto ilusa tratando de hablar de mis gustos y criterios a veces poco fundamentados...

Y justo anoche, llegó la iluminación, hablaré de algo que existe en mi cotidianeidad, expondré textos donde haga un reconocimiento aquellos detalles de los que día a día nos admiramos y poco comentamos, una frase muy común en mí es: “yo soy bien fan de…”, es por eso el URL de este blog: “declárome fan”.

Cada entrada contendrá algún detalle de los que me he declarado fan en mi caminar por este mundo ¡já!, así como las razones por las cuales me cautivan esos detalles que nos regala la tierra y nos regalamos como seres humanos unos a otros y estaría muy bueno que los pocos lectores que logre captar (mis amigos que nunca me abandonan seguro estarán aquí) me digan de quién se declaran fanáticos.

Así que hoy, por inauguración declárome fan de… ¡los que leen la primer entrada!
Por ser tan bandas y leer éstas letras quitándoles un rato de su ocio cibernético. Gracias de verdad, me ayudan a realizarme y dejar mi pobre testimonio al mundo JAJAJAJA.