26.7.12

Siempre el mismo día.

Voy a citar lo que escribí alguna vez en una publicación que hice para La Mona

"La frase “el arte es la expresión máxima del ser humano” es ineludible; una pieza musical, una puesta en escena, una poesía, una novela o una película tienen el poder de brindar una experiencia sensorial única a todas las personas de la tierra, me atrevo a generalizar: a TODAS."

Hoy viene al caso porque mi hermano, más conocido como @TheMovieland me recomendó la película "One day", protagonizada por Anne Hathaway y Jim Sturgess, es un romance entre dos polos opuestos, el desarrollo de la historia es bastante bueno y... no soy crítica de cine, ni tampoco soy experta, incluso tiendo a olvidar los nombres de los actores/actrices, más aún de los productores/directores, etc., pero lo que si puedo es sentir la alteración de los sentidos cuando estoy expuesta a cualquier expresión del ser humano a través del arte.


Para mí, una película cumple su función cuando la interpretas, y esto aplica para cualquier expresión artística. Por un lado los creadores quieren comunicar algo, pero será muy complicado descodificar ese mensaje intrínseco cuando las condiciones del artista son completamente distintas a las tuyas, en ese sentido, una misma obra, nunca será lo mismo para todas las personas, he ahí lo maravilloso de eso que llamamos arte.

No sé si me expliqué. A veces, una película, un libro, una canción, una obra de teatro, un baile... te hace ser pleno, a tu manera. ¿Les ha pasado?.

Buen jueves en compañía de ese pedazo de cine. Declárome fan de los jueves como estos.

Para ver "One day" en línea ve al enlace.

25.7.12

βουστροφηδόν.

El bustrófedon, según la RAE,
,ribircse ed arenam al se
empleada en Grecia antigua,
nólger nu razart ne etsisnoc euq
de izquierda a derecha y el siguiente
.adreiuqzi a ahcered ed



19.7.12

Caracteres robados.

Hace unas horas, un joven barbón escribió en Twitter:

"Claro ejemplo de no depender de nadie, no quejarse de nada y hacer las cosas por iniciativa propia. Gracias Papá."

Luego, ilustra sus palabras con la siguiente fotografía:



Decidí robarme esos caracteres para darle intención a la presente entrada. El muchacho barbón y yo somos hermanos, por lo tanto es un placer coincidir con esta admiración hacia nuestro Padre, o como le llamamos en la red: Gran Robledo.

El verbo que lo definiría: acción, también deberíamos sumarle algo de impulso.

Si me dedicara a escribir su biografía, lograría una historia muy interesante, él es el mejor ejemplo para burlarse del tiempo, la distancia y los problemas; tal vez, su fe y ligereza en los temas importantes de la vida sea la clave para salir avante cada rato.

Desde muy pequeño ha sido totalmente independiente y no por opción propia sino por las jugarretas de la vida, a veces pienso que es un fugitivo misterioso, llegó a un lugar donde nadie lo conocía, hizo una vida genial, supongo él soñó así alguna vez y después de 30 años, algo lo hizo regresar a sus pagos, regalándonos unos encuentros e historias impensables, me atrevería a pensar que lo había planeado justo como se dio. ¡Qué ganas de ser él!.

Él es él y el mundo; todo su misterio se esconde en sus ojos, en cada uno de sus rulos, en sus manos, ¡sí!, sus manos son muy peculiares, en ellas recae toda su fortaleza, y de esto se desprende la mejor herencia que como hijos (me atrevo hablar por mis 5 hermanos), hemos recibido en vida; la fusión del cariño maternal y paternal es lo que hace que el mundo tenga sentido, ellos, son polos opuestos y juntos hacen magia, cantarían por ahí: "Tienen gustos distintos pero se quieren igual". Sí. 

A veces, la cotidianidad parece que gana, pero, de pronto, enseguida pasa algún detalle totalmente agradable, como la placa de la fotografía, que nos da el siguiente testimonio: si queremos una vida dinámica, cada quien es responsable de darle sobresaltos a los días, genera sorpresas. ¿Desventaja?, los extremos opuestos también cuentan.

Ya me extendí demasiado, las letras acumuladas nunca podrán describir todo lo que siento por él, por ella y por ellos, son lo mejor de mi corazón. Hoy, me quería declarar fan de esas acciones que hacen la diferencia.

Declárome fan de ti, Gran Robledo.

¡Nadie nos va a parar!.